- HEMATURIA: la hematuria es la presencia de sangre en la orina. Está puede ser microscópica (cuando se detecta solamente en la analítica) o bien macroscópica (cuando aparece una orina roja). La presencia de sangre en la orina siempre debe ser estudiada y debe buscarse la causa que la origina. Una orina roja con emisión de coágulos sobre todo en paciente fumador es motivo de alerta y debe ser estudiada de forma preferente. Las causas más frecuentes son la infección urinaria, cálculos urinarios y siempre hemos de descartar la causa tumoral.
- OLIGURIA Y ANURIA: consiste en la disminución de la diuresis en mayor o menor grado. La vejiga urinaria apenas tiene orina. Cuando se reduce el volumen de orina de forma importante es motivo de valoración médica. Las causas pueden ser variadas desde la deshidratación, infección urinaria a cálculos urinarios.
- RETENCIÓN URINARIA: es la imposibilidad de orinar pero en este caso con la vejiga llena de orina. Hay ganas de orinar pero no es posible emitiendo sólo unas gotas. La causa más frecuente es la hipertrofia prostática. En este caso suele ser necesario realizar un sondaje urinario.
- DOLOR TESTICULAR: ante un dolor testicular que aparece de forma súbita (sobre todo en niños y adolescentes) es necesaria la valoración urológica urgente. Es necesario descartar que el testículo se haya girado y no le llegue sangre a este. En este caso si no se actúa de forma rápida puede producirse la pérdida del testículo. Otras causas de dolor testicular son las infecciones a este nivel (epididimitis u orquitis). En este caso el dolor no suele ser tan intenso y suele aparecer de una manera progresiva.
- BULTO EN TESTÍCULO: un aumento de tamaño del testículo debe ser motivo de valoración por urólogo. Una masa testicular que no duele y que no desaparece con el tiempo es motivo de alarma y debe descartarse un proceso tumoral.